29.10.2015

Burka – Palabra del día

Además de la mezquita en sí misma, hay pocas cosas que se identifiquen tanto con el islam como el burka. Esta prenda se asocia a la devoción de la mujer por su fe. Sin entrar en el terreno espinoso de los derechos de género, de los argumentos y de la crítica en torno al burka, todavía hay muchísima ignorancia sobre los antecedentes de este atuendo.

Para aquellos que no estén familiarizados con el burka, se trata de una prenda larga que cubre todo el cuerpo y que es utilizada predominantemente por las mujeres musulmanas que respetan unas tradiciones islámicas específicas. Al parecer, la palabra es tan mística como el propio atuendo: nuestra palabra es la forma escrita en hindi del árabe burqa, aunque su origen viene del persa purda, que significa cortina o velo.

La razón del burka tiene que ver con la modestia en la forma de vestir y de actuar en público, pero ¿cómo llegó a ser así? Puesto que se ve habitualmente en un contexto religioso, vamos a fijarnos en dos versos coránicos que mencionan el burka: “Decir a vuestras esposas e hijas y a las mujeres de la fe que se envuelvan bien con sus prendas exteriores; que es mejor que se las reconozca que enojarse con ellas (Sura 33, verso 59) y “Y decid a las mujeres fieles que bajen la mirada y que cubran sus partes privadas y que no muestren su belleza excepto lo que se perciba y que alarguen sus prendas para tapar la cabeza (khimares) para cubrir el pecho (jaybs) y que no muestren su belleza” (Sura 24, verso 31). Si vamos más allá del sentido religioso y a un momento anterior al propio islam, este concepto de modestia se desprende de la ética y está relacionado con el sentido de Namus, que en la cultura de Oriente Medio se considera una virtud y es sinónimo de sentido del honor, modestia y respeto. Puesto que el Corán fue escrito por personas del Medio Oriente, existe la posibilidad de que el concepto de Namus ejerciera influencia sobre los preceptos en la forma de vestir que se mencionan en el Corán.

En inglés, el primer uso conocido del término tuvo lugar en la obra de Edward William Lane en 1938, The Manners & Customs of the Modern Egyptians, donde declaraba que “El burka, o velo facial, que consiste en una larga tira de muselina blanca que oculta todo el rostro, a excepción de lo ojos, y que prácticamente llega hasta los pies”. Kipling, medio siglo después, en Beyond Pale de la obra de 1888 Plain Tales from the Hills, menciona al más oscuro de los varones vestidos con un burka: “Iba ataviado con un burka, que hace las veces de capa, tanto para hombres como para mujeres”. Para concluir, en 1905 William H. Hunt recuerda a todo el mundo la razón de utilizar burkas en elprerrafaelitismo, donde señala que “Se permitían sus súplicas para satisfacer sus ojos con los rasgos ocultos bajo el negro burka.”