12.11.2015

Doodle / garabato – Palabra del día

A primera vista, si alguien te ve haciendo garabatos puede pensar que estás perdiendo el tiempo o que no estás prestando atención. Muchos ven en este acto una simple pérdida de tiempo para paliar el aburrimiento, similar a jugar a Angry Birds durante una reunión. No obstante, puede que las investigaciones científicas actuales les hagan cambiar de fama. Antes de elogiar a los doodlers, como se denomina en inglés a aquellos que suelen hacer garabatos, y de revolucionar el mundo de las reuniones para siempre, prestemos atención a la palabra en sí.

Aunque casi siempre se asocie a simples dibujos en papel y a Google Doodle, el significado de nuestra palabra de hoy es muy diferente. Proviene de la palabra alemana Dudeltopf, cuyo significado inicial era tonto o bobalicón, como decía la conocida canción Yankee Doodle que cantaban los leales a los británicos en la Guerra de la Independencia de EE. UU. Lo que hizo que el significado de la palabra pasara de definir a una persona a definir a un trazo artístico fue la extendida creencia de que estos pequeños dibujos no eran más que una pérdida de tiempo o vacilación, asociada a lo que suelen hacer los tontos.

Al contrario de las creencias sobre los garabatos, pueden ser más útiles de lo que se pensaba. Según un estudio de 2009 realizado por la Universidad de Plymouth, los participantes que hacían garabatos durante un experimento retenían una media de un 29 % más de información que los que no lo hacían. Además, un artículo publicado en 2011 en la revista Science demostraba que si, al describir algo, se dibuja o se emplea material visual, en lugar de solo palabras, las personas comprenden mejor el concepto y son capaces de comunicarlo con más facilidad. Por último, parece que los propios garabatos ocultan un significado: si tendemos a hacer garabatos con líneas rectas, los grafólogos dirán que somos más tímidos y prácticos, mientras que si los garabatos son grandes y con formas redondas y curvas seremos más afectivos, seguros y extrovertidos.

La palabra doodle la empleó por primera vez en inglés John Ford en su obra de 1629 The Lovers Melancholy en la que escribió “Vanish, Doodles, Vanish” para definir a una persona tonta o simplona. El primero en utilizar, y definir, el significado actual de la palabra fue Russell Arundel, quien en 1937 definió en su libro de garabatos la palabra de la siguiente forma: “Un ‘doodle’ es un esquema o trazo que realizamos mientras nos concentramos en asuntos que no tienen ninguna relación con dichos trazos.” Dos décadas después de Arundel, Helen Gardner ya era consciente de que no se trataba de simples trazos y escribió en The Limits of Literary Criticismque “Si se conservan los primeros bocetos, el material rechazado y los garabatos de un escritor podremos tener cierto éxito al realizar un seguimiento de cómo funciona su imaginación creativa.” Resulta interesante que aunque Gardner escribiera esto hace casi 60 años hayamos descubierto ahora que es cierto, y no solo para los escritores.