Vamos a comenzar con un dato poco esperado, el deporte nacional de Letonia. Aunque el fútbol es el deporte más popular en muchos de los países colindantes, en Letonia el hockey sobre hielo es el rey y esto dice mucho de los letones, ya que este deporte no es para países normales, es un deporte duro que requiere jugadores y aficionados unidos y fuertes.
Y si quiere conocer el nivel de unión de los letones, escuche la historia de Namejs: Durante una invasión de los cruzados alemanes al principio del siglo XIII, el líder de los zemgalianos fue obligado a dejar a su hijo, pero antes de irse, le dio un anillo especial para poder reconocerlo cuando volviera. Al descubrirlo, los alemanes buscaron al chico y, para salvarlo, se hicieron muchas copias del anillo y se distribuyeron entre los jóvenes letones, que los llevaron con orgullo y disposición para sacrificar sus vidas en nombre de la independencia y unidad de la nación.
Y si quiere pruebas de la dureza de los letones, hay que empezar por sus predecesores, las antiguas tribus bálticas de curonios, latgalianos y selonianos, excelentes guerreros y cuya ferocidad militar fue incluso inscrita en una iglesia danesa: «Señor, sálvanos de la peste, el fuego y los curonios».
Las tribus bálticas se consideraban más peligrosas que los propios vikingos y no sin razón, solo hay que viajar a 1187. En una época el que toda la costa europea estaba siendo saqueada, expoliada y quemada por los vikingos, Letonia fue uno de los pocos países que no solo se enfrentó a ellos y siguió siendo independiente, sino que atacaron y redujeron a cenizas la capital vikinga de Sigtuna, en Suecia.
Es más, Letonia fue uno de los últimos países en ser cristianizados ya que las tribus bálticas ofrecieron una larga resistencia a los cruzados.
Durante los siglos posteriores, los territorios letones fueron invadidos y conquistados en numerosas ocasiones por alemanes, holandeses, suecos, polacos y, finalmente, rusos, pero Letonia se ha convertido en un país independiente, conservando su idioma, su cultura y sus tradiciones, y muchos chicos siguen llevando el anillo de Namejs como símbolo de orgullo nacional.
Está claro que los letones están orgullosos de su historia y honran la bandera nacional, que es una de las más antiguas del mundo, con registros escritos desde el siglo XIII y con su distintivo color rojo oscuro, a veces denominado «rojo letón». La bandera de Letonia es el símbolo ondeante de la dureza y unidad nacional, y de su disposición para dar la vida por la independencia y la prosperidad del país.
Y, de hecho, Letonia, respaldada por su pueblo unido, está prosperando, y los antiguos invasores están ahora entre los nuevos inversores de la floreciente economía del país. Y si su empresa también está pensando en «invadir» el mercado de Letonia, nuestro equipo de traductores e intérpretes de letón están listos para proporcionarle servicios de traducción de gran calidad que satisfagan sus duros requisitos y plazos.
